Traer el clima hacia adentro es usualmente lo contrario que uno desea de una envoltura de un edificio. Sin embargo, una nueva investigación de la Universidad de Oregón, descrita en un artículo de The Washington Post, pretende mostrar los beneficios físicos y psicológicos de dejar entrar la naturaleza. Signos de naturaleza y cambio son beneficiosos para nuestro bienestar, siendo que no siempre tenemos accesos a ellos dentro de los edificios--y ahora los humanos están pasando el 90% de sus vidas adentro. Pero incluso en un escenario urbano, donde la naturaleza puede ser difícil de encontrar, no hay forma de escapar del clima. Cuando los investigadores encontraron formas de llevar cosas como el viento y reflejos del sol hacia adentro, encontraron que la exposición a estos movimientos naturales bajaba las frecuencias cardíacas, mientras que distraían menos que los movimientos similares generados artificialmente.
Por ahora, los edificios verdes son un concepto familiar, pero el artículo en The Washington Post propone ir más allá de los edificios verdes que conocemos hoy en día. Mientras que los edificios verdes pueden ser ideales en las nuevas construcciones, que excluyen a muchos edificios existentes que podrían y deben también beneficiarse de una intervención de la naturaleza. Idealmente, los edificios deberían demostrar activamente su relación con la naturaleza, moviéndose más allá de un simple "no hacer daño".
Añadir movimiento a las técnicas existentes de edificios sustentables puede ayudar a concientizar a los habitantes de estas características ecológicas. Un ejemplo del artículo involucra la adición de una capa superficial de agua en una repisa de luz, que luego es ondulado por el viento, creando patrones de luz solar a través del techo. Los movimientos de luz, viento, y lluvia han demostrado tener un efecto calmante sobre los ocupantes del edificio. Los investigadores en el artículo incluso estudiaron si estos movimientos naturales podrían ser replicados por un software pero encontraron que los movimientos generados artificialmente no sustituían a la naturaleza viva.
Sin embargo, si bien la incorporación de la naturaleza al diseños es bastante simple en proyectos como las casas, puede ser más un reto en proyectos institucionales como hospitales, escuelas y oficinas. Entonces, ¿Qué trucos inteligentes pueden ser utilizados por los arquitectos para añadir un toque natural a sus diseños? A continuación, hemos hecho una pequeña selección de proyectos en donde cada uno a usado diferente técnicas innovadoras para incorporar naturaleza en beneficio de sus ocupantes y el planeta.
Fundación Santa Fe de Bogotá / El Equipo de Mazzanti
En la ciudad de Bogotá, este esfuerzo de crear un "hospital jardín" incorpora un espacio de solana en donde la exposición a la naturaleza puede ser una parte beneficiosa en el tratamiento de los pacientes. A través de la plantación y un uso innovador del ladrillo, el solario esta protegido y a la vez da acceso a patrones de luz cambiantes, ventilación natural y aire fresco de las plantas. El solario permite que los pacientes tengan contacto con la naturaleza a través de cubículos protegidos o directamente en el patio, y como resultado el hospital ha visto desde entonces una reducción en el tiempo de recuperación.
Maggie’s Oldham / dRMM
Otro centro de salud, Maggie's se especializa en el apoyo de las personas afectadas por el cáncer. Este particular Centro Maggie's se centra en los aspectos curativos de la naturaleza, específicamente de los árboles y la madera. El centro es construido alrededor de un árbol, que crece en el medio del edificio y puede ser visto a través de paredes de vidrio desde cualquier lugar dentro del espacio.
Oficinas Corporativas KMC / RMA Architects
El edificio de oficinas repiensa el concepto de una "pared verde" con un sistema de doble piel que incluye bandejas hidróponicas integrales y un sistema de nebulización en su fachada exterior de pared vegetal. La vegetación modula la luz y el aire dentro del edificio y diferentes especies de plantas están organizadas para crear un cambio estético estacional en el exterior.
Universidad con Diseño Pasivo en Ladrillo / Taisei Corporation
En Vietnam tropical, este edificio universitario usa estrategias pasivas para mantener el confort. Grandes marquesinas crean una terraza semi al aire libre protegida del sol, la lluvia y las pantallas de ladrillo poroso permiten la entrada de luz natural. Las pequeñas aberturas en el patrón del ladrillo dispersan la luz del sol que entra, creando un constante cambio a lo largo del día. Los estudiantes están protegidos, pero no aislados, de la naturaleza.
Sede EDU / Empresa de Desarrollo Urbano EDU + Salmaan Craig
En Medellín, Colombia, el nuevo edificio de la sede EDU pretende ser "un edificio que respira", utilizando un innovador tipo de ventilación pasiva. La ventilación natural es capaz de responder al aumento en la ocupación y es más confiable que la ventilación eólica. Incluso sin viento, la ventilación natural puede mantener una brisa agradable a través del edificio.
Centro de Recepción Chupei / CYS.ASDO
A medida que la naturaleza se entreteje en este espacio de oficinas, se enmarcan vistas específicas, creando sombras que marcan el paso de las horas y las estaciones que cambian. La forma del edificio crea aberturas y transparencias creando una mezcla entre el interior y exterior.
Y por supuesto, no se olviden de averiguar acerca de la ciencia detrás de la naturaleza en los edificios en The Washington Post.